Magdalenas de vainilla y chocolate

Superando la procrastinación que me atenaza me pongo delante de otra hoja en blanco para redactar la última receta para el blog.

Hace poco he leído en algún sitio sobre las bondades de la red, para mí que soy curiosa por naturaleza ha sido el mejor descubrimiento, poder viajar virtualmente a lugares que no podré ir jamás, actividades que me atraen y que despiertan la imaginación y la inventiva, recetas que cuando las ves en fotografías preciosas te invitan a probarlas y te animan a intentar hacerlas.

Pero, siempre hay un pero, el inconveniente es que yo que también por naturaleza soy muy entusiasta lo quiero hacer todo y es ahí donde entonces empiezo a procrastinar o a deprimirme porque ¡¡¡es tanto lo que me atrae….!!!!.

En el caso de la receta de hoy en principio me atrajo la fotografía y al comprobar que es de las que me gustan, fácil, con ingredientes sencillos y que podemos encontrar sin ninguna dificultad, vistosa y al probarla ¡¡muy rica!! se adelantó a otras que tenía pendiente publicar.

Os recomiendo visitar el blog de la receta original Mi dolce paradiso porque encontraréis recetas y fotografías estupendas.

Espero que os gusten.

Ingredientes

• 100 g de mantequilla a temperatura ambiente
• 150 g de azúcar
• 10 g de azúcar vainillado
• 3 huevos medianos o 2 grandes y una yema
• 150 g de harina de repostería tamizada
• 1 cucharadita de levadura
• 100 ml de nata para montar en este caso no hace falta que sea de la que tiene más de 35% de materia grasa
• 1 cucharada sopera de cacao puro en polvo (por ejemplo Valor) tamizado
• Una pizca de sal

Moldes para magdalenas y moldes desechables de aluminio o flaneras de acero inoxidable o los moldes que son múltiples.

En el caso de hoy he utilizado estos moldes que compré en la tienda física que ha abierto Morgana del blog Tartas con magia. También los tiene en la tienda online "La tartienda”

 
 

Elaboración:

Precalentar el horno a 180º

Batir la mantequilla junto con los azucares hasta que tengamos una mezcla esponjosa. Incorporamos los huevos de uno en uno sin añadir el siguiente hasta que no esté bien integrado el anterior.

Añadimos la harina con la levadura y la sal  poco a poco y mezclamos bien. Y finalmente incorporamos la nata y mezclamos.

Separamos esta masa en dos partes aproximadamente iguales y a una de ellas le añadimos el cacao que previamente habremos tamizado (suele tener muchos grumos) y mezclamos bien.

Vamos poniendo una cucharada de masa sin cacao (yo lo hago con el utensilio de repartir helados) en cada molde y encima otra cucharada de la masa con el cacao y cuando estén todos con un palillo hacemos remolinos o como más nos guste para entremezclar las dos masas.

Metemos en el horno durante 18/20 minutos dependiendo del tamaño de los moldes, estos los he tenido 20 minutos pero es conveniente hacer la prueba del palillo y comprobar que sale limpio antes de sacar del horno.

Cuando estén listas las dejamos enfriar unos minutos y las sacamos de los recipientes dejándolas reposar en una rejilla hasta que estén frías.

Observaciones:

En la mayoría de las recetas de repostería salvo que la receta lo especifique es conveniente que los ingredientes estén a temperatura ambiente.

Los hornos son un mundo, es bien sabido y en la cocina como en algunos sitios hay también unos duendes que hacen que un día la receta salga de maravilla y otro no tan bien, con ellos no podemos contar y salvo que la receta en cuestión tenga algún problema, que también puede pasar, lo normal es que salgan bien pero ¡¡depende del humor del duende !!!

Yo suelo testar siempre varias veces antes de publicar una receta así que, como siempre digo si me sale a mí no tiene por qué salir mal.

¡¡¡Suerte, disfrutad de estas magdalenas y no olvidéis visitar a Mary!!!.