Patatas Bravas

Estas patatas bravas son receta de mi madre, las pueden comer los niños porque no resultan muy fuertes, a no ser que pongais tabasco fuerte si os gustan que piquen.


Ingredientes:

1 diente Ajo
1 cucharadita de pimentón (picante o dulce según nos guste)
1 cucharada sopera colmada de Harina
1 cucharada de Ketchup
1 cucharadita de Tabasco suave
1 cucharadita de orégano en polvo
Aceite de oliva
Sal

Elaboración:

Machacar el diente de ajo en un mortero junto con la sal, añadir una cucharadita de orégano molido, llenar el mortero de agua y reservar.
En un cazo poner el aceite y cuando esté caliente rehogar la harina y el pimentón, hay que añadir el pimentón en último lugar teniendo cuidado de que no se queme. Añadir el agua que teníamos reservada y remover.
Cuando empiece a hervir añadimos un buen chorro de Ketchup y una cucharadita de tabasco suave o picante según nos guste. Dejar cocer a fuego lento hasta que espese. Si nos gusta más o menos espeso añadimos harina o agua, hay que tener en cuenta que si añadimos harina ésta tiene que estar previamente tostada, lo que quiero decir es que si vemos que nos hemos quedado cortos de harina, hay que poner un poco de aceite en una sartén y freír la harina, y le añadimos un poco de la salsa y esto lo pasamos a la cacerola para que espese.
Las patatas deben ser de 1ª calidad, las pelamos y partimos en cuadrados grandes y las freímos en abundante aceite de oliva, a fuego lento al principio y en el último momento subimos el fuego para que queden crujientes.
Las sacamos y las dejamos escurrir en un papel de cocina y a la hora de servir le ponemos la salsa por encima.
Si sobra salsa se puede conservar en el frigorífico para otra tanda de patatas, basta con calentarla un poco en el micro o en la cacerola en el momento de utilizarla.

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